jueves, 13 de marzo de 2008

PILAR NARVIÓN SE "CONFIESA" CON JUAN CARLOS SORIANO

Aunque lleva más de veinte años retirada de su profesión y de la vida pública, Pilar Narvión es una de las periodistas históricas de la España del Siglo XX. Nacida en Alcañiz en los "felices veinte" del siglo pasado, comenzó a aprender el oficio cuando sólo era una niña en el periódico local que había fundado su tío, Mariano Romance. Muchos años después ingresaría en la Redacción de Pueblo, donde comenzó haciendo la crónica de socidad, para ser después corresponsal del periódico de los Sindicatos Verticales en Roma y París. Regresó a España cuando estaba gestándose la transición a la democracia y desempeñó un brillante papel como cronista política y parlamentaria, además de como Subdirectora del diario. El fin de Pueblo llegó con la victoria socialista del año 82 y la subsiguiente decisión de liquidar lo que se llamaba la "Cadena de Medios de Comunicación Social del Estado". Y con el fin de Pueblo, a Pilar Narvión le llegó la jubilación.
Acaba de aparecer una biografía de esta mujer irrepetible titulada Pilar Narvión, andanzas de una periodista perezosa de la que es autor Juan Carlos Soriano, turolense como Pilar y uno de los periodistas más destacados de Radio Nacional de España. Un libro con el que Soriano salda una deuda de gratitud con la Narvión, que le acogió en las páginas de Pueblo a comienzos de los años ochenta, cuando sólo era un estudiante llegado a Madrid con la ilusión de aprender el oficio de su ilustre paisana.
La Sala de Columnas del Congreso, grande y magnifíca, fue el escenario elegido por Ediciones Tirwal para presentar este libro escrito a partir de horas y horas de conversaciones entre el autor y la protagonista del mismo. Una protagonista aquejada ahora, a sus años, de un ataque de coquetería, según explicó su sobrino, Javier Capitán, para justificar su ausencia en el acto de presentación. Pero sí estuvieron algunos de los que han hecho aportaciones al libro, como Manuel Fraga y la escritora y periodista Julia Navarro, quien se proclamó orgullosamente "una de las niñas de Pilar".
"Este libro está concebido como un homenaje a Pilar Narvión -aseguró Juan Carlos Soriano en sus palabras de presentación- aunque al final, y a medida que lo iba redactando, era yo el que me sentía privilegiado por las confesiones de Pilar". "Lo fundamental, lo importantísimo -prosiguió- era que la voz de Pilar sonara tal cual es, aunque tuviera que sintetizar muchas de sus respuestas; y por eso he respetado sus latiguillos, las claves de su sentido del humor, su ironía. Espero que sus páginas les descubran a una testigo privilegiada de la segunda mitad del Siglo XX, que además tuvo la virtud de abrir muchas puertas a toda una generación de periodistas que veníamos detrás y que dimos nuestros primeros pasos acompañados por las enseñanzas y los consejos de Pilar".
"En el Congreso nos llamaban las niñas de Pilar y yo estoy muy orgullosa de ser una de esas niñas", aseguró Julia Navarro, una de las periodistas más sobresalientes que ha dado España en las últimas décadas. "A pesar de esa proclamada vagancia que queda reflejada en el título del libro -añadió Navarro- yo no he conocido a nadie que trabajara más que Pilar. En cierto modo, fue una pionera que abrió caminos para otros, supo aprovechar las oportunidades que le ofrecieron y, aunque no pueda decirse que sea nominalmente feminista, lo que yo sí puedo decir es que no he visto a nadie que hiciera tanto por la mujer".

Este perfil presuntamente conservador o derechista de Pilar Narvión es poco más que un cliché, en opinión de Julia Navarro, quien no dudó en calificarla como una "gran demócrata". Una gran demócrata que había conocido a fondo los mecanismos de la política democrática en sus tiempos de corresponsal en Roma y en París, lo que le otorgó una reconocida autoridad moral cuando regresó a España. ¿Por qué no te has casado?, contó Navarro que solían preguntarle aquellas jóvenes periodistas a su mentora y ella siempre respondía que por ser muy distraída y perezosa. "Al ser tan distraída -comentaba Pilar- a lo mejor he tenido a mi lado al que podría haber sido el gran amor de mi vida y no me he dado cuenta; y al ser tan perezosa, no sé cómo habría llevado eso de cargar con un marido y unos hijos". Esa soltería voluntariamente aceptada le dió la oportunidad de hacer con su vida lo que le diera la gana, según explicó Javier Capitán. "No hay un solo día -contó Capitán- en que ella no lea los periódicos y sigue viviendo la actualidad con más intensidad que muchos periodistas que están en activo". Pilar Narvión nunca entendió el periodismo como una forma de poder, y por eso, según su sobrino, "dijo no a la oferta de dirigir los informativos de TVE y dijo no a la oferta de ser la Directora de Pueblo".
CORREDORA DE FONDO
Según Juan Carlos Soriano, dos terceras partes de la obra están ocupadas por la transcripción de las conversaciones que ambos mantuvieron en la primavera de 2007. En estas conversaciones, además de recuerdos personales y periodísticos, que entrevera con anécdotas y análisis agudos, Narvión centra sus reflexiones en la revolución que ha experimentado el periodismo con las nuevas tecnologías y en la evolución de la mujer española, en el terreno social y laboral, a lo largo del Siglo XX. El otro tercio lo ocupan las colaboraciones que han escrito un total de 22 personajes de primera fila que han tenido trato directo con la periodista, que la conocieron de cerca, y entre los que cabe destacar a Manuel Fraga, que estuvo en la presentación como decíamos, Santiago Carrillo e Iñaki Gabilondo. También se publica una selección de las crónicas escritas por Pilar Narvión en las páginas de Pueblo.
El libro se abre con un autorretrato escrito por la periodista, autorretrato titulado Corredora de fondo, y en el que asegura que "el periodista es el último humanista de nuestro tiempo. Todavía nosotros estamos interesados en todo, en una época en la que sólo triunfan los grandes especialistas de las particularidades muy limitadas. Pienso también que el periodismo es la última aportación seria a los géneros literarios. Si las literaturas alborean con la lírica y la épica, viven después sus siglos de oro del teatro, descubren luego sus grandes capítulos de la novela o del ensayo, es indudable que la última gran novedad literaria, como género, ha sido esta del periodismo".
Y en el último capítulo, titulado Los días serenos, Narvión le habla a Soriano de sus paseos un poco melancólicos por los alrededores de Medinaceli, de sus reflexiones sobre la vejez, la muerte y la importancia de la familia, porque ella, pese a haberse quedado soltera, sigue siendo el epicentro de una gran familia. "Ahora que tengo mucho tiempo para pensar -dice- sobre lo que he hecho y lo que he dejado de hacer en mi vida, llego a la conclusión de que, si no hubiera sido periodista, me habría dedicado a escribir novelas. Creo que he tenido las dos cualidades básicas para ese oficio: una buena prosa y mucha imaginación..."
En definitiva, pues, una feliz idea de Juan Carlos Soriano, que ha encontrado una excelente acogida en Ediciones Tirwal, y que merece tener también una buena acogida entre los lectores deseosos de conocer un poco más a fondo las claves del pasado aún reciente, tanto de España como de Europa.






1 comentario:

Telmo Gamboa dijo...

Como ves, me he convertido en un asiduo de la blogosfera. No tengo ninguna duda de que el libro de Soriano será una delicia, llena de ironía turolense, por lo que toca al autor y a la biografiada. He de felicitarle, como te felicito a tí por la crónica de la presentación, inlcuida esa revelación de que hubo mujeres abrieron camino a la igualdad, sacrificando otras cosas, supongo, incluso antes de la llegada del Felipismo.
Además quiero solidarizarme con tu protesta por lo carísima que han puesto la cerveza en Gambrinus y denunciar que Cruzcampo no es precisamente una de las mejores cervezas de nuestro páis.